Apuñalamiento con la Espada Maestra de Zelda

      Buenas tardes querido lector, indagando por los extensos medios de comunicación he visto esta noticia digna de una buena crítica. Y es que ¿que persona en su sano juicio se toma la violencia de género por si misma?
      Ya se que muchos de ustedes pensarán que no es tan fácil dar el paso de llamar al 016 y hacer la denuncia por muchos motivos. Varios de ellos son principalmente el miedo a que no se haga justicia y que el agresor pueda atacar otra vez a su víctima; o incluso que se de a la fuga y no se sepa donde está, viviendo de este modo en constante sufrimiento. Otros motivos pueden ser el afecto que le tienen a dicho agresor y que piensan que el mal genio es parte de su conducta natural, así que le dan lástima denunciarlo y se niegan a hacerlo.
      Por desgracia, en esta noticia una joven tiene una pelea con su marido y en vez de llamar al 016 o al 112, decidió llamar a su exnovio. Este vino y comenzó a discutir con bastante agresividad con el marido de la joven, llamado Thompson, e inquilino de la casa. El exmarido, bajo mi punto de vista hizo bien al acudir al rescate de la exnovia, aunque fue muy imprudente ya que bajo el estado de amenaza en el que estaba debido a que Thompson poseía un arma blanca (la mítica Espada Maestra de Zelda), no avisó ni a la Policía Local ni a los correspondientes servicios de emergencia, por lo que resultó herido, como es obvio. Tras este hecho el marido saca al ex de su casa, aunque este vuelve, sin aprender la lección de avisar al 112 o al 016, y Thompson le ataca con la espada provocándole cortes en las piernas y pecho. Este, para hacerse el héroe y no ser menos, cogió una maceta y se la lanzo a la cabeza del marido; y como es normal, los dos se encuentran hospitalizados, y gracias a Dios, no muertos; mientras que la mujer se encuentra ilesa.

      Querido lector, dos son las ideas que le propongo: la primera es que si es usted la víctima, acuda a emergencias y no llame a cualquier personal no cualificado; y la segunda se trata de que si se encuentra implicado como espectador de un maltrato, no se tome la justicia por su cuenta. La vida es maravillosa, ¿por que acabar con ella de este modo?