sábado, 26 de abril de 2014

Una mujer de 36 años es operada por error sin anestesia

Al leer la siguiente noticia no he podido dejar de pensar por lo que ha tenido que pasar esta pobre mujer, una experiencia así no es deseable para nadie.

Esta chica de 36 años, Alexandra Bythell, fue operada sin anestesia de una apendicectomía, despertándose de esta forma en medio de la operación. Ella misma ha relatado el pánico que sintió al estar completamente incapacitada de poder hacer o decir algo, llegando a pensar que iba a morir. Dentro de esta trágica experiencia, la extracción del apéndice fue todo un éxito, pero ha dejado en la paciente secuelas postraumáticas. Tengo que decir que bajo mi punto de vista, siempre he escuchado que la operación de la extirpación del apéndice es algo simple, aunque eso no quiere decir que no pueda haber complicaciones durante su desarrollo, ya que esa probabilidad es posible hasta en la operación más sencilla.
No se si mi pensamiento es el correcto al no tener conocimientos sobre medicina, pero en cualquier caso, el fallo ha estado en un error médico al equivocarse con el gas de la anestesia, siendo esto primordial para que el paciente este totalmente anestesiado durante la operación. Es decir, el hospital debería asegurarse de que este todo en condiciones antes de una operación, revisándolo hasta dos veces si es necesario, ya que se esta jugando no solo con la vida de las personas, sino con su futuro que puede quedar dañado por una mala experiencia como esta.
 

Pero lo que más me ha llamado la atención, ha sido la incapacidad por parte del hospital de admitir dicho error desde el primer momento. Los médicos encargados de su operación tomaron su relato como algo "inventado", dándole largas a la paciente  y diciéndole que eran alucinaciones suyas. Después de todo esto, el hospital pidió disculpas y admitió su error; algo que para mi gusto se debería haber hecho desde un comienzo y que puede haber afectado aún mas al estado en el que se encuentra Alexandra por la mala experiencia que vivió.

Además, el centro médico ha abierto un nuevo protocolo de actuación para evitar que se repitan sucesos como estos, pero desgraciadamente esta pobre mujer ya lo ha vivido y entiendo como se debe de sentir. También a procedido a indemnizar a la joven. Este último aspecto, me hace pensar sobre los pacientes que sufren secuelas después de casos como estos, ya no solo estoy hablando dentro del terreno de la medicina, sino en general. Se ven casos donde pasajeros de algún vuelo son indemnizados por accidentes causados por culpa de las compañías, pero yo me pregunto si el dinero que reciben puede hacer que se olviden del mal rato que han podido pasar.

Un error puede ser cometido por cualquiera, pero en estos casos estamos hablando de vidas. Por lo que me gustaría terminar diciendo que se intenten evitar, reforzando las medidas necesarias para que no sucedan.