El viernes salió a la luz la noticia que trata de que la
Unión de Guardias Civiles presentará una querella contra la comisaria europea
Cecilia Malmström al apreciar que imputó a agentes de este cuerpo de Ceuta a
través de medios de comunicación homicidio involuntario durante los sucesos del
pasado día 6 cuando murieron ahogados en el mar 15 inmigrantes.
En un comunicado, UniónGC respalda además "sin ambages
la actitud" del director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de
Mesa, "que no dudó en salir en solitario en defensa de estos
agentes". UniónGC recuerda que el respeto a la vida forma parte del
ideario de cualquier guardia civil…
Esta noticia es consecuencia de todo lo que se viene
hablando y acusando desde que el pasado día 6 de febrero murieran ahogados 15
inmigrantes que intentaban cruzar la frontera a nado, y que al ser descubiertos
por la Guardia Civil que protege la frontera, está intento pararlos disparando,
al parecer, balas de goma, lo que provocó el pánico con la desgraciada
consecuencia de 15 personas muertas ahogadas.
Debemos de entender todos que la Guardia Civil es un cuerpo
de la seguridad del Estado cuya misión en la frontera es proteger al Estado
Español e impedir que entren inmigrantes ilegales, no solo a España sino al
resto de Europa.
Es cierto, que estas personas que intentan cruzar la
frontera, de cualquier forma incluso jugándose la vida, lo hacen por pura
desesperación. Buscan una vida, ya que la mayoría vienen de vivir situaciones
de auténtica desesperanza creyendo lo que las mafias les dicen de que aquí van
a tener trabajo y una mejor vida. Pero lo que tenemos que preguntarnos es ¿Es
responsabilidad de la Guardia Civil la resolución de este problema? NO.
Pensemos que la Guardia Civil, en principio, no actúa por iniciativa propia, actúa acatando
ordenes, por lo que pretender ahora culparlos de “homicidas” es muy fuerte, ya
que lo que se está intentando es utilizarlos como culpables para tapar la
incapacidad de los políticos para dar soluciones a un problema cada vez mayor,
la entrada de oleadas de personas que utilizadas y organizadas por mafias
buscan un futuro en nuestro continente y que la “puerta” por donde entran es
nuestra frontera. Y olvidando la cantidad de veces que esos mismos agentes han
arriesgado la vida para rescatar a muchos de estos inmigrantes de morir.
Por lo tanto la Unión Europea debe estar tanto o más
implicada en regularizar e impedir estas desagradables situaciones que el
propio Estado Español. Sobre todo si recordamos que fue y es la propia Unión
Europea la que “cerro” la entrada a Europa por marruecos y pidió que aumentara
la vigilancia de la Guardia Civil en las fronteras”.
Deberíamos hacer la reflexión siguiente: Si para contentar a
las Autoridades Europeas (e incluso algunas españolas) no se puede utilizar
material disuasorio en la frontera, ¿Cómo se paran cuando intenten entrar en
oleadas de 500 o más personas? ¿En una lucha cuerpo a cuerpo? ¿Con que cuentan
estos agentes a la hora de hacer valer la autoridad del Estado? Con petardos se
asusta en las ferias pero no a la multitud que intenta entrar buscando la
tierra prometida….
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