Buenas tardes, en la siguiente noticia se habla de que miles
de personas se han concentrado este sábado en el área metropolitana de Caracas,
para denunciar los abusos del Gobierno de Nicolás de Maduro. Dirigentes de la
oposición venezolana y representantes estudiantiles encabezaron una
multitudinaria manifestación opositora en Caracas y establecieron una lista de
exigencias al Gobierno, entre las que figuran la libertad de los detenidos y el
castigo a los culpables de represión en las marchas.
Bueno, poco se puede decir del gobierno de un país en el que
se coartan una y otra vez los derechos fundamentales de los ciudadanos. De los gobernantes de un país que aparecen en
programas propios de televisión con la indumentaria dominguera con los colores
de su bandera y gorra futbolera. Poco se puede decir de los discursos y el
barroquismo leninista del tono de sus mensajes abocados a desprestigiar al
capitalismo invasor.
Pero centremos un poco la mirada en este país para intentar comprender
su realidad social. Los problemas sociales en Venezuela son de muy variada
índole, y afectan a todos y cada uno de los estratos sociales que conforman
esta sociedad. El desempleo, el subempleo, la marginalidad, la seguridad
social, la seguridad personal, la delincuencia, la drogadicción, la
prostitución y el embarazo precoz, son sólo algunos de tales problemas. Estos
problemas tienen causas comunes, entre las que resaltan la falta de educación
del grueso de la población así como la corrupción que se ha instaurado en
muchas instancias gubernamentales.
Venezuela es uno de los países de Latinoamérica que va en
picada en todos los aspectos. Una de las razones, a mi entender, es el
populismo de las medidas implantadas por el Gobierno Nacional, las cuales,
hasta ahora, lejos de solucionar los problemas, los han acentuado.
La pretensión del Presidente de la República anterior y de
su sucesor, a dedo, Nicolás Maduro, de conducir al país hacia el Socialismo,
como sistema de gobierno, ha derivado en la expropiación de tierras
productivas, por el solo hecho que estaban en manos privadas.
Asimismo, la estatización de empresas privadas, como empresas de alimentos, textiles, cementeras, siderúrgicas, metalmecánicas, etc., ha devenido en la disminución importante de la producción de éstas. En algunos casos, se ha causado la paralización total de la producción y la necesidad de decretar vacaciones colectivas para el personal de las mismas, como ocurrió en algunas empresas básicas de la Región Guayana.
Asimismo, la estatización de empresas privadas, como empresas de alimentos, textiles, cementeras, siderúrgicas, metalmecánicas, etc., ha devenido en la disminución importante de la producción de éstas. En algunos casos, se ha causado la paralización total de la producción y la necesidad de decretar vacaciones colectivas para el personal de las mismas, como ocurrió en algunas empresas básicas de la Región Guayana.
Todo ello ha ido minando a una parte de la población que ve
como su país, uno de los productores de petróleo más importantes del mundo, va
perdiendo la libertad que pudo obtener tras su independencia y se ha
transformado más en una Cuba adinerada que una Noruega. Y fruto de ello son las
continuas protestas de los estudiantes, la formación de grupos paramilitares….
Y en medio de esa lucha, una oposición, posiblemente manejada desde el poder
gubernamental, trata de mover a las masas.
Es importante plantearse que la libertad de un pueblo se
consigue sin ataduras, y por el momento, desde las ataduras del petróleo
pasando por las de la educación dirigida, hacen de Venezuela vaya perdiendo las
esperanzas de avanzar y de prosperar como pueblo libre.
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