La patronal sevillana pide tomar medidas «urgentes» para que el aeropuerto de San Pablo consiga despegar.

Aquí os traigo compañeros, esta noticia publicada el 26 de Noviembre, en el diario de tirada nacional ABC. En ella podemos ver datos importantes sobre Sevilla y su aeropuerto, el cual necesita un "empujón" debido a sus continuas caídas en pasajeros y mercancía desde hace unos años.

Miguel Rus, presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), afirmó que se necesitan medidas muy urgentes para la revitalización del aeropuerto de Sevilla-San Pablo, explicando que deben unirse todas las administraciones, que deban intervenir, para un proyecto conjunto que vuelva a unir Sevilla con otros aeropuertos españoles y europeos volviendo a ser una ciudad de primera categoría y no de tercera, como lo es ahora. Así, recoge ejemplos, como un debate que se hizo hace diez años para animar también el transporte aéreo y, que según recuerda el propio presidente, tuvo resultados positivos.

El aeropuerto de Sevilla-San Pablo es uno de los seis aeropuertos más rentables gestionados la empresa  que administra de aeropuertos españoles, AENA. Sin embargo, apenas supera los cuatro millones de pasajeros de los ocho millones que podría albergar. Esto significa que el aeropuerto llega con dificultades a la mitad de su capacidad y que si ya de por sí es rentable, se le podría sacar el doble de rentabilidad según datos reales. No obstante, parece que los altos mandos de Sevilla tienen una incesante agonía por invertir en proyectos que, o bien se dispara el presupuesto final a lo largo de la obra, o bien no tienen apenas utilidad, o bien ni siquiera se empiezan. Así pues podemos poner varios ejemplos: véase el Metropol Parasol de la Encarnación, cuyo coste superó los 150 millones de euros, el Tranvía (también conocido como "el trenecito de Sevilla"), la gran ronda de circunvalación SE-40 o  la magnífica red de Metro que se planteó para la capital hispalense, de la cual hoy podemos ver una linea de las cuatro que se proyectaron para abastecer a la capital andaluza de los continuos problemas de tráfico que padece. Esta claro que Sevilla es una ciudad en la que poco a poco se ha ido perdiendo la confianza para los grandes proyectos.

Aún así, no todo es negativo. Actualmente la capital de Andalucía está haciendo unos esfuerzos sobre humanos para poder revitalizarse, centrándose en la Industria y el sector Servicios. Ya tenemos empresas aeronáuticas (industria muy bien asentada en Sevilla) que funcionan a pleno rendimiento, nuevas entradas de empresas del sector Servicios como Primark, Costco o BricoDeport y aquí es donde entra el plan del aeropuerto de San Pablo, tan necesario para un rejuvenecimiento completo de la ciudad.

Ya se están llevando a cabo,- en la ciudad, proyectos de gran magnitud, como por ejemplo, la Zona Franca del Puerto de Sevilla la cual ya ha sido concedida por la Administración central y que entra así en uno de los logros obtenidos por el actual alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido. Este proyecto, de una zona en el puerto libre de impuestos y cuyas empresas destinan sus productos a la exportación, entra dentro del Plan de Desarrollo del único puerto fluvial de España. Por ello, una de las opciones que baraja la CES es la de ampliar esa zona franca al aeropuerto Sevilla-San Pablo para reavivar así el comercio de mercancías aeroportuarias con las principales ciudades europeas, e incluso ampliar fronteras a ciudades como Atlanta u Oslo. Por ello, estas medidas que pide la patronal son, desde mi punto de vista estrictamente necesarias para la ciudad ya que tanto un aeropuerto como un puerto, son en cualquier ciudad con esas instalaciones, las principales vías de creación de empleo, financiación para proyectos y entrada de nuevas empresas, que generan riqueza y turismo.

Sevilla es, actualmente y sin duda, una ciudad de oportunidades para cualquier tipo de empresas y sinceramente, esperemos que en un futuro más que cercano la ciudad vuelva a vivir el esplendor de épocas no tan pasadas.